El problema central que pretendemos abordar en este artículo consiste en cómo pensar históricamente una subjetividad política. Buscamos desentrañar cómo se efectuó la extenuación de la productividad política del démos ateniense reflexionando sobre el derrotero a través del cual el démos produjo su propio agotamiento como sujeto político. Esta cesación tuvo su vector fundamental en la propia asamblea que, extremando al límite su capacidad instituyente, decidiría la abolición de la democracia y la de la práctica asamblearia misma, esto es, la del poder del pueblo y la de su dispositivo de subjetivación. Las matanzas perpetradas por las bandas oligárquicas o los mecanismos punitivos arbitrados por los demócratas en la asamblea inhibieron la posibilidad de que la política se realizara conforme al procedimiento hasta entonces vigente, que no anulaba el conflicto pero constituía para el démos la instancia de su subjetivación a través de la cual realizaba su política. Así pues, el golpe oligárquico de 411, la restauración de la democracia en 410, su accionar hasta 405, el golpe oligárquico de 404 y la rebelión democrática que le siguió configuran en su conjunto un proceso que inhibió la efectividad de los procedimientos asamblearios, apelándose según los casos a la represión o a la movilización de la multitud para garantizar el control del espacio político.
Fil: Gallego, Julián. Universidad de Buenos Aires; Argentina.
Gallego, Julián. CONICET; Argentina.