Literatura, Estado y nación: hacia un nuevo comparatismo hispánico

Abstract

En continuidad con proyectos anteriores, nos proponemos estudiar las relaciones entre literatura, Estado y política, en el marco de los debates contemporáneos acerca de la nación y en un corpus de autores y textos españoles y latinoamericanos. Tras estudiar los retos que la literatura mundial y los nuevos comparatismos oponen al paradigma de la historiografía de las literaturas nacionales, ahora revisaremos la participación de la literatura entre los dispositivos de gubernamentalidad estatal en formas que excederían el modelo proporcionado por las historias de formación de las culturas nacionales. Es nuestra hipótesis que una rehabilitación de la pregunta por excelencia de la teoría literaria acerca de la literatura podría desentramar los vínculos culturales rígidos entre literatura, Estado y nación, para evidenciar modos alternativos de legitimación de lo común. La 'capilaridad' de las intervenciones del Estado hace que la distinción misma de Estado y sociedad, de cuya contraposición rígida dependen gran parte de las definiciones sociológicas de la literatura, resulte conflictiva: el énfasis en 'lo social' de la literatura invisibiliza cómo ella se constituye también como una institución del Estado -y no solo como encarnación de una nación a partir de su caracterización en términos identitarios. Por otro lado, es necesario cuestionar la comprensión unívoca del rol de mediación cultural de la literatura a partir de la noción modernista de medio literario específico, dominado por el imaginario excluyente que opone la 'lengua nacional' a su negación-abstracción internacionalista y cosmopolita. De ser ciertas nuestras ideas acerca de la intervención de la literatura en la mediatización de las relaciones sociales, nos encontraríamos ante una propuesta superadora en los recientes debates acerca del comparatismo en literatura a partir de un análisis material de la medialidad literaria. Así, volvería a ser pertinente estudiar la literatura en su potencia de inmediatización, de generación de experiencias inmersivas de lectura y sustracción radical respecto de su constitución medial material. Esto permitirá desplegar una reflexión sobre una configuración posible de los mundos literarios ya no dependiente de una teoría general del medio ficcional y capaz de incorporar los cruces y mezclas impuestos por una concepción comparatista y trasnacional radical de la literatura y la lectura.