Abstract:
En este artículo se sostiene que las formas cotidianas de evaluar la tarea docente en la escuela constituyen un aspecto central del análisis de la dimensión histórica de la identidad de este trabajo. Mediante el análisis del Cuaderno de Actuación Profesional como un "documento" producido en el ámbito escolar, se realiza una periodización de las orientaciones que el estado asigna al trabajo docente. La particularidad del estilo coloquial del Cuaderno es coincidente con la vida en la escuela, que transcurre y se legitima por medio de la oralidad. Por medio de su examen se despliega la hipótesis de que la escuela es al mismo tiempo una institución fuertemente política y un mundo de infancia atravesado por vínculos de tipo familiar-doméstico. La característica mencionada inhibe las formas "objetivas" de evaluación del trabajo específico de los maestros en torno al conocimiento. Esta aparente limitación, de acuerdo con los postulados del modelo profesionalista, permite una aproximación a la complejidad de este trabajo y pone de relieve su importancia en la perspectiva de la democratización de la escuela.