Hace ya casi medio siglo Marc Bloch, en ocasión de su comentario de las obras
de Michaélson, destacaba, desde las páginas
Annales el valor de los estudios antroponímicos para el historiador de la sociedad.
Cartularios, censiers, terriers, así como registros fiscales notariales
y parroquiales constituyen un rico venero a través del cual es posible destacar algunos
hitos de
de la lengua, sentimientos religiosos, costumbres, estructura de la
familia, migraciones, etcétera. El Profesor
Jacques Heers me sugirió hace ya algún
tiempo la posibilidad de realizar un pequeño estudio de este orden con el material aportado por el terrier de Maussat y La Romagiére. En efecto, este documento, cuyó estudio ha constituido el tema central de mi tesis de doctorado, registra los nombres de 713 personas, dependientes de este señorío, en el período
1470-1480.
Fil: Homet, Raquel. Universidad de Buenos Aires; Argentina.