La tesis “La voz del centauro” se propone demostrar que los ensayos del poeta Joseph Brodsky constituyen a la vez: un espacio de posicionamiento ético estético relativo a la configuración de una identidad entre dos culturas (norteamericana y rusa) y dos lenguas (inglesa y rusa); la elaboración de una poética y de una filosofía del lenguaje, necesariamente vinculadas a las experiencias históricas del comunismo soviético y del exilio; y la articulación de una “biografía” no romántica, no referencial ni orgánica.
En el primer capítulo, la tesis sustenta su noción de “ensayo” en una vasta bibliografía teórica (centralmente en Lukács, Bense, Adorno), que describe y analiza con solvencia, para trabajar sobre un corpus heterogéneo de ensayos de Brodsky (artículos, reseñas, conferencias, cartas, introducciones, seminarios). Esa heterogeneidad no está considerada en sí misma como un problema que pueda plantear cuestiones de especificidad en torno al discurso ensayístico. En este sentido, el género en Brodsky funciona como un tipo de ensayo estético, cuyo objeto es principalmente la literatura, abierto en términos formales y lógicos, discontinuo y asistemático; abierto en este sentido a la experimentación poética. El ensayo así en Brodsky constituye una transposición de la poesía (“dispositivo poético”, “estructura rítmica”, “tecnología poética”) a la prosa.
En el segundo capítulo, la tesis se ocupa de la “biografía” del autor en sentido político como en sentido estético con el objetivo de destacar la singularidad de la posición política de Brodsky, en la medida en que el poeta elige no confrontar con el Estado soviético sino ignorarlo. La descripción de esa posición disidente, que se sustenta en las posiciones de la generación de escritores rusos anterior (Pasternak, Mandelshtam, Tsvetáieva, Ajmátova) está en la base de la elaboración de una filosofía del lenguaje y de una ética de la literatura. Esa filosofía y esa ética se definen en torno a dos lecturas: la de la generación disidente de escritores rusos (especialmente Tsvetáieva) y las lecturas, en el exilio interno y en el norteamericano, de los poetas de lengua inglesa (en particular, Robert Frost y W. H. Auden). El trabajo con la lengua inglesa y las traducciones de los propios poemas rusos al inglés configuran la propia poética brodskyana algunos de cuyos principios pueden leerse en los ensayos.
El tercer y último capítulo estudia en profundidad particularmente uno de los tres aspectos (poética, filosofía del lenguaje y ética de la literatura) de los ensayos y la poesía de Brodsky: la elaboración de una ética de la literatura en relación con el rechazo de la biografía, entendida en términos romántico orgánicos. Este rechazo implica, por un lado, un deliberado distanciamiento entre obra y vida, y por otro, la presencia en los poemas de “biografemas múltiples” que rechazan la constitución de un todo, y que solo son legibles en los “giros del lenguaje”.
Fil: Alonso, Diego Fernando. Universidad de Buenos Aires. Facultad de Filosofía y Letras.